16.5.25

Abrazar las incomodidades de la libertad, o ceder al encanto de un “mundo feliz” vacío

LA NOVELA ‘UN MUNDO FELIZ’             

YA ES UNA REALIDAD POR MUCHOS MOTIVOS

Un Mundo Feliz, publicado en 1932 por Aldous Huxley, es una novela distópica que imagina un futuro donde la humanidad ha renunciado a la libertad individual a cambio de una estabilidad social y una felicidad artificial. En este Estado Mundial totalitario, los gobiernos ejercen un control absoluto sobre cada aspecto de la vida humana: desde la concepción hasta la muerte. 

Los ciudadanos son diseñados genéticamente, condicionados psicológicamente mediante hipnopedia y pacificados con una droga llamada Soma, que elimina cualquier malestar. Este sistema elimina el dolor, el conflicto y la individualidad, pero a costa de la creatividad, el amor auténtico y la esencia humana.

15.5.25

Es quedarse en silencio para acompañar; es decirle al otro: puedes habitarme un rato

EL DON DE ESCUCHAR                           

En tiempos donde el yo se agiganta y el otro se desvanece, la escucha —esa profesión silenciosa del alma— emerge como la única posibilidad de encuentro real. -Byung-Chul Han.

En tiempos donde el ruido se disfraza de diálogo y la palabra se lanza más para afirmarse que para encontrarse, la escucha se ha vuelto un acto de resistencia. Escuchar —escuchar de verdad— es hoy un gesto radical, casi revolucionario.

Hay un don secreto, uno que no brilla en la pantalla, que no busca aplausos ni seguidores, que no se hace viral. Es un don silencioso, casi místico. No se enseña en las escuelas ni se premia en las redes. Pero quien lo ha recibido —quien lo cultiva—, sostiene el alma del otro con manos invisibles. Ese don es la escucha.

14.5.25

Las armas del pueblo si nacen de la unión de conciencia y consciencia, son infalibles

LA REVOLUCIÓN QUE NUNCA PUDO SER                

En el mundo reina hoy una gran inquietud multifactorial: a las guerras presentes y a la amenaza de otra nueva, se suma la ineficacia y descrédito de instituciones como la ONU, el Tribunal Internacional de derechos humanos, el Defensor del pueblo, la militancia política ultra de muchos jueces, el descrédito de la Iglesia -pese a estrenar Papa- el auge del fascismo y la indecente y criminal pasividad de los gobiernos ante el horroroso genocidio del pueblo palestino a la vez que muestran beligerancia frente a Rusia y apoyo a Ucrania, pero no por un principio humanitario del que carecen si se trata de Palestina, sino por lo de siempre entre ambiciosos violentos: conseguir su parte en las abundantes tierras raras, y eventualmente en el control de su gobierno, convertido ya de facto en un Estado fallido.

Esta procesión no viene sola, sino muy acompañada. A los dramáticos daños ambientales, económicos y emocionales de las catástrofes producidas por las defensas  del Planeta, acosado, envenenado y enfermo por el capitalismo depredador, destructor humano y medioambiental, se suma su gestión  neoliberal -neofeudal- con su crisis económica permanente y global como resultado.

13.5.25

Son capaces de abrazar la inseguridad, la imprevisibilidad, con total cotidianeidad

VIVIR EN LA INCERTIDUMBRE

Los seres humanos llevamos muy mal la incertidumbre. Desde tiempos inmemorables hemos tratado de predecir los acontecimientos futuros. Sentimos una gran curiosidad por saber qué es lo que nos va a pasar, a lo que se le suma una necesidad perentoria de controlar los eventos futuros. 

Nos hemos encomendado a oráculos, consultado a los dioses, mirado a las estrellas, leído las cartas o incluso nos hemos atrevido con los posos del café. Porque conocer el futuro hace que nos sintamos poderosos, invencibles y lo más importante, nos da mucha tranquilidad.

Sin embargo, llevamos cinco años viviendo en un no saber continuo. Hemos pasado una pandemia mundial; un virus que mutaba sin control y que jugaba al escapismo con las vacunas; nos hemos enfrentado a una erupción volcánica, que se llevó miles de hogares por delante. Estamos siendo testigos de varias guerras cruentas, una de ella dentro de la propia Europa.

12.5.25

Invertir en relaciones sociales no es un lujo: es una necesidad y una medicina esencial

SOCIALIZAR NOS SALVA                    

En tiempos de apagón… y en cualquier crisis

Cuando todo se tambalea, las relaciones humanas se convierten en un salvavidas. En momentos de crisis, como el reciente apagón que paralizó parte de España, el instinto de conectar con otros –incluso desconocidos– no solo es reconfortante, sino clave para nuestra salud mental. La ciencia lo confirma: estamos biológicamente diseñados para apoyarnos en los demás, y esa red de vínculos, grandes o pequeños, puede marcar la diferencia entre el colapso emocional y la resiliencia.

Los seres humanos dependemos de la cooperación para sobrevivir. Matthew Lieberman, director del Laboratorio de Neurociencia Cognitiva de la Universidad de California en Los Ángeles, describe el cerebro humano como fundamentalmente social, equiparando nuestra necesidad de conexión a la de alimento o agua.

9.5.25

El dilema segueix dempeus i cada cop més radical. El temps de les paraules s’ha acabat

© SEGUIR PICANT FERRO FRED       

Com deiem ahir...

Per molt que ho veiem venir, per molt que ens consti de forma inapel·lable, per molt que en parlem, seguim aturats sense prendre les decisions que la realitat ens reclama amb urgència.

L’apagada general de fa uns dies és una demostració més de per on van els trets. No voler-ho  veure és una constatació més de la línia de control en la que estem submergits de fa temps.

Amb un simple clic tots quedem en el desvaliment més miserable i encara ens entretenim amb el “sexe dels àngels” per comptes d’encarar d’una vegada la transcendència d’aquest sotmetiment.

8.5.25

El aprendiz debe filtrar las ideas para vivir una vida buena y mejorar la sociedad

APRENDER PARA SEGUIR SIENDO HUMANOS

Ars longa, vita brevis — Hipócrates

Aprender no es una actividad más del ser humano. Aprender es la actividad que nos ha hecho humanos. Desde los primeros gestos imitados en la infancia hasta los sistemas de conocimiento más sofisticados que hoy pueblan la inteligencia artificial, nuestra historia es una historia de aprendizaje. Sin él, no habríamos domesticado el fuego, ni inventado la escritura, ni podríamos interrogarnos por el sentido de la existencia. Aprender es un juego infinito: no se gana, no se termina; se juega porque el juego en sí es el que sostiene la vida.

Antropológicamente, aprender es una estrategia evolutiva. La antropóloga Sarah Blaffer  subraya que lo que distingue al Homo Sapiens no es su fuerza ni su tamaño, sino su sociabilidad: nuestra tendencia a observar, imitar y cooperar con otros. En este contexto, el aprendizaje no es solo acumulación de información, sino una forma de inserción en una cultura. Margaret Mead, pionera de la antropología cultural, lo ilustró bien: no hay infancia sin aprendizaje, y no hay sociedad que no moldee ese aprendizaje desde sus propios ritos y símbolos.

7.5.25

Cal seguir el camí del mig, aquell que travessa les coses i no es queda retingut en elles

LA FORÇA DE L’AMOR S’HO EMPORTA TOT

La força de l’amor s’ho emporta tot i no ho fa pas sense pietat sinó generosament, perquè en tot hi acaba havent un cert dolor. Si totes les coses que apareixen acaben desapareixent vol dir que en procés de descomposició li podem reconèixer la mateixa quantitat d’amor i compassió que la que li veiem en el moment de la generació.

És la mateixa força de l’amor que tot ho crea la que s’ho endú tot, perquè amb el temps, tot acaba fent més mal que bé. La força de l’amor dóna final a les coses perquè la seva comesa és temporal. Tot té el seu sentit i la seva funció, però només en té durant un cert temps. Per això, la mateixa força amorosa que tot ho crea, tot ho destrueix.

6.5.25

La libertad sin responsabilidad podría interpretarse como permisividad disfrazada.

NO ES POSIBLE PERMITIRLO TODO

La paradoja de la tolerancia de Karl Popper

La libertad de expresión es uno de los pilares de toda sociedad democrática. Nos permite disentir, debatir y construir futuros distintos. Pero, ¿qué ocurre cuando ese mismo derecho se convierte en el escudo de quienes promueven el odio? ¿Hay algo perverso en tolerar al intolerante?

El filósofo Karl Popper lo advirtió: La tolerancia ilimitada debe conducir a la desaparición de la tolerancia. Su argumento, planteado en el libro La sociedad abierta y sus enemigos, no es un llamado a la censura automática, sino una reflexión profunda sobre los límites de lo que una sociedad abierta puede permitir si quiere seguir siéndolo. 

5.5.25

No podemos seguir viviendo así. Tenemos que despertar. Tenemos que mejorar.

ESTAMOS LLAMADOS A DESPERTAR

Tanto hacia afuera como hacia adentro

Despertar hacia afuera es despertar del trance de la propaganda y el adoctrinamiento y despertar hacia adentro es despertar del trance del ego y el engaño.

Despertar hacia afuera significa tomar plena conciencia de lo que realmente ocurre en nuestro mundo más allá de la propaganda y de lo que nos enseñaron en la escuela. Aprender sobre todas las formas en que hemos sido engañados y manipulados, aprender la verdad sobre la guerra, el militarismo, el imperialismo, el capitalismo, el autoritarismo, el ecocidio y todos los abusos e injusticias interrelacionados causados por los sistemas y estructuras de poder bajo los que vivimos.

2.5.25

Sigue caminando y conecta con aquellos que, como tú, están buscando la verdad

LAS ALMAS VACÍAS QUE NOS RODEAN

En un reciente hilo publicado por el usuario @eumelvi, se plantea una reflexión inquietante sobre la existencia de lo que denomina «almas vacías»: personas que, a pesar de su apariencia humana, parecen carecer de una verdadera chispa de conciencia, funcionando como autómatas dentro de un sistema que los controla. 

Este concepto, desarrollado en dos partes, no solo invita a la introspección, sino que también conecta con ideas filosóficas, psicológicas y culturales que han sido exploradas a lo largo de la historia.

El post inicial «ALMAS VACÍAS: ¿EXISTE UNA HUMANIDAD SIN ESPÍRITU?», comienza con una observación cotidiana: todos nos cruzamos con personas que parecen desconectadas, incapaces de cuestionar su entorno o de buscar una verdad más allá de lo evidente.