CÓMO LOS INDIVIDUOS PERMITEN LA TIRANÍA
Es fácil pensar que las raíces de la tiranía se encuentran fuera de nosotros, pero tal vez estamos mirando demasiado lejos.
En la novela de Milan Kundera La insoportable levedad del ser, una refugiada checa que vive en París se une a una marcha de protesta contra la invasión soviética de su patria en 1968. Para su sorpresa, la refugiada no se atrevió a gritar con los demás manifestantes y pronto abandonó la manifestación. Sus amigos franceses no entendían su reticencia.
La refugiada reflexionó en silencio que sus amigos nunca podrían entender que “detrás del comunismo, el fascismo, detrás de todas las ocupaciones e invasiones, se esconde un mal más básico y omnipresente y que la imagen de ese mal era un desfile de personas que marchaban con los puños en alto y gritando sílabas idénticas al unísono».