JABÓN LÍQUIDO O SÓLIDO
¿Es una estafa diferenciar gel y champú?
Nos gustaría hacer un artículo sobre las cápsulas de
café; para que los consumidores las dejaran de usar. Absurda idea. Los
consumidores de esas cápsulas jamás leerán artículos como estos. Prefieren
disfrutar —sin cargos de conciencia— de su café cargado. Prefieren pensar que
las cápsulas son biodegradables o
reciclables, aunque sospechen que su empresa cafetera miente. Prefieren pagar
más, y que nadie les diga que están siendo estafados.
Dejando a un lado ese espinoso y aromático tema, queremos centrar ahora nuestro olfato en un asunto más práctico: el jabón. La industria ha sido capaz de convencer masivamente a la población para que se use separadamente jabón líquido, gel y champú. En el fondo son tres productos prácticamente idénticos, pero al diferenciarlos consiguen que en cada casa haya, al menos, tres botes distintos por cada cuarto de baño (sin contar los de repuesto). A veces incluso hay tres por persona. En envase de plástico de usar y tirar, por supuesto. ¿Cuántos botes hay en tu cuarto de baño? ¿Cuántos de ellos serían prescindibles si estuviéramos en una crisis ambiental sin precedentes?