20 REFLEXIONES QUE BROTAN DE MI INTERIOR
- ¿Para qué combatir al Sistema si el Sistema somos todos?
- El Sistema que creemos que nos “oprime” se disolverá solo, si no
lo reforzamos con nuestros votos y con nuestros miedos.
- Cambiemos el Sistema implicándonos día a día en alternativas por el bien común, aunque éstas estén en contra de las reglas “establecidas”.
- ¿Para qué votar partidos?. Los votaré cuando sean enteros.
- ¿Para qué elegir a alguien que me represente sí me siento capaz de
defender mis ideas y de ponerlas en práctica?.
- ¿Para qué competir en todas las facetas de nuestra vida, si
disfrutamos compartiendo?
- Quiero jugar un buen partido y disfrutar perdiendo, fusionándome
en un abrazo con quien me ha ganado.
- Quiero celebrar mi derrota en todo porque no soy ni mejor ni peor
que mi contrario.
- He aprendido a dar y recibir en exceso. ¿Qué voy a hacer con
tanto? Seguiré dando.
10. ¿Para qué ser
solidario dando solo un poco de limosna?. Quiero compartir todos, todos, mis
conocimientos.
11. Compartir nuestros
conocimientos es el mejor regalo para nuestros iguales desfavorecidos.
12. El dinero fácil, las
subvenciones, las ayudas “desinteresadas” provocan dependencia, incultura,
miseria y sufrimiento.
13. Los conocimientos
ayudan a ser creativos y a superar los conocimientos que hemos recibido.
14. Nadie inventa o crea
nada, sin los conocimientos anteriores recibidos.
15. ¿Para qué patentar
“nuestras” ideas, si son el fruto colaborativo de otras mentes?. Hagamos que
sean de uso universal y gratuito.
16. El día que las
patentes y las marcas no estén de moda y nadie las “compre”, se ha acabado el
sufrimiento moral, económico y social.
17. ¿Necesitamos seres
sin alma que gestionen nuestros conocimientos? Prefiero disponer de ellos
libremente sin intermediarios.
18. Mientras las patentes
existan, PIRATEARÉ. Porque el conocimiento no es de nadie y es de todos.
19. Todos somos seres
únicos e inmensos solo hace falta que creamos en nuestra inmensidad creativa.
20. Arriesga compañera/o.
Agárrate a la vida. Disfruta de ella y nunca temas nada, ni tan siquiera al
último de nuestros días, porque este es el día en que AFORTUNADAMENTE, empieza
todo otra vez.
Josep
Pàmies, 23-09-2016
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