la tasa "Robin Hood"
El impuesto a las transacciones financieras, sugerido en los años 70 por el economista James Tobin y despreciado durante cuatro décadas por la burocracia política y económica, ha tomado un importante giro para convertirse en realidad.
En abril de este año la organización The Robin Hood Tax, lo tomó como una bandera de lucha con una serie de videos como éste que interpreta el actor Ben Kingsley, en el cual es asaltado en un estacionamiento por una pandilla que luego de revisar su cartera, las llaves del coche, el teléfono móvil y el portafolios, le devuelve todo excepto cinco peniques.
The Robin Hood Tax, junto a Amigos de la Tierra y ActionAid, entre otros, han logrado el apoyo de 183 organizaciones de 42 países que, en conjunto, han emitido una petición a los líderes del mundo que se reunirán en Corea del Sur esta semana, para imponer un impuesto sobre las transacciones financieras que permita ayudar a cubrir los costos de la crisis económica y apoyar a las naciones que se han visto más afectadas por la crisis. La carta está dirigida a los líderes del G-20, incluyendo el primer ministro del Reino Unido, David Cameron, y el presidente de Estados Unidos, Barack Obama.
Un impuesto sobre las transacciones financieras ayudaría a cubrir los costos de la crisis y a reducir el enorme déficit en que han incurrido los gobiernos para enfrentarla, eliminando la necesidad de aplicar drásticos recortes en el gasto público. Este sería el aspecto más importante del impuesto Robin Hood, que permitiría dar un giro hacia la recuperación de los equilibrios profundamente deteriorados por la crisis. Una de las manifestaciones de estos desequilibrios es que el gran sector financiero y principal responsable del actual colapso sistémico, ha sido el gran beneficiado de la crisis. Este mes, los banqueros de Wall Street se reparten 144.000 millones de dólares, varias veces los recortes presupuestarios de algunas comunidades europeas.
Resulta un contrasentido que cuando los gobiernos de todo el mundo se embarcan en drásticos planes de austeridad, y cuando el desempleo en gran parte de las economías se mantiene en niveles inaceptables, un puñado de banqueros se reparta los beneficios generados por el propio caos que crearon. De ahí la imporancia de aplicar un leve impuesto sobre las transacciones financieras meramente especulativas conocidas como capitales golondrinas y que operan por la via el carry trade buscando los diferencias de tasas de interés que han desatado los colapsos de Islandia o Grecia.
Un impuesto a las transacciones financieras de 0,05% como propone http://www.robinhoodtax.org.uk/ pondría un freno a la especulación que ha condenado a la ruina a varios países europeos, y evitaría la dependencia de la ultrafinanciación de corto plazo, verdadero vicio del sistema. La existencia de una Tasa Tobin, habría ayudado a evitar la crisis actual, y su aplicación puede ayudar a evitar crisis futuras.
Marco Antonio Moreno
El Blog Salmón
8.11.2010
http://www.elblogsalmon.com/mercados-financieros/instan-al-g-20-a-adoptar-la-tasa-robin-hood
TEMAS RELACIONADOS:
No hay comentarios:
Publicar un comentario