LA COOPERATIVA EL TIMBAL: Un
nuevo local y un proyecto renovado
La entidad logra financiar su expansión y el cambio de su
local gracias a créditos participativos y aportaciones de socios y amigos.
La sociedad ampliará su formación impartiendo un ciclo
formativo de grado superior de artes escénicas que creará la Generalitat
El Timbal es una empresa dedicada a la formación teatral.
Hace 45 años se fundó como compañía familiar y hace cinco pasó
a ser una cooperativa. Pero su continuidad estaba en peligro. Por
dos razones. Una de tipo económico y la segunda de proyección de futuro.
«La sede del Timbal está situada en la calle Puerta Ferrissa
de Barcelona, en un lugar de una gran demanda comercial. Como ha ocurrido con
otros locales de renta antigua el alquiler que el Timbal pagaba estaba a punto
de dispararse fruto del cambio legal que así lo posibilita », explica Marc Brualla,
socio de la cooperativa y portavoz. Era urgente, pues, encontrar una nueva sede
donde ubicar la cooperativa teatral. Y también, hacer un nuevo proyecto y las
reformas imprescindibles.
Esta necesidad se sumaba a otra de carácter más positivo:
«la Generalidad finalmente pondrá en marcha un ciclo formativo de grado
superior en artes escénicas para alumnos de Formación Profesional, lo que
significará que los estudiantes además de conocimientos tengan un título
oficial al terminar sus estudios», asegura Marc Brualla. Pero, para poder
impartir los estudios mencionados es necesario, además de demostrar suficiente
capacidad pedagógica, tener instalaciones adecuadas. Y aquí entra de nuevo la
necesidad de un local preparado.
Conseguir 300.000 euros para el salto adelante
Los miembros del Timbal decidieron impulsar el proyecto.
Contactaron con la cooperativa de arquitectura Lacol, que elaboró los aspectos
técnicos y encontró el nuevo local. Todo ello tenía un coste superior a los
300.000 euros. Este era el principal escollo para llegar a buen puerto. Y en
este punto entró en funcionamiento la intercooperación.
«Nos pusimos en contacto con la cooperativa Coopdemà, que
nos guió en el proceso de buscar la financiación necesaria», explica Brualla.
De hecho, esta cooperativa ya había colaborado con el Timbal en poner en orden
sus cuentas.
Jean François Guillemet es socio de la cooperativa Coopdemà.
Está especializado en asesorar entidades de la economía social y experto en
gestión económica y financiera. «Nosotros habíamos colaborado hace cinco años a
ordenar la gestión del Timbal. Así que cuando nos explicaron el caso nos
pusimos a trabajar». El plan, explica Jean François, se basó en aprovechar la
red creada durante los 45 años de funcionamiento de la cooperativa teatral:
«convertir una amenaza en oportunidad».
Involucrar al colectivo del Timbal
El segundo elemento
del plan fue involucrar en el futuro del Timbal el gran colectivo de amigos,
alumnos, antiguos alumnos y compañeros de profesión teatral creado durado la vida
de la entidad. Se emitieron títulos participativos a un interés del 2% y con un
retorno a tres años. Así se han conseguido 40.000 euros más. «La cifra obtenida
ha pasado desde un primer cálculo de 15.000 euros hasta superar el doble»,
explica Guillemet.
La tercera pata del plan económico fue conseguir un crédito
de la cooperativa de servicios financieros, Coop 57. La cifra obtenida ha sido
de 120.000 euros. Como es habitual en los contratos de Coop 57 los préstamos se
conceden de acuerdo con dos elementos: la solidez del proyecto y los avales
mancomunados y solidarios suscritos por amigos y colaboradores del Timbal.
Dichos documentos consisten simplemente en el compromiso de que, en caso de no
poderse pagar los créditos, asumir unas cantidades que oscilan entre los 800 y
los 4.000 euros por persona.
Desde Coopdemà se buscaron otros 95.000 euros con un crédito
participativo negociado a partir de la intercesión de la Federación de
Cooperativas de Trabajo de Cataluña (FCTC) que, a través de la fundación Seira,
consiguió que Gicoop, entidad especializada en financiar proyectos
cooperativos, otorgara un préstamo. Este tipo de crédito permite que las
entidades concesionarias participen en la marcha de la entidad financiada:
«tienen derecho a voz pero no a votar en la asamblea», dice el portavoz de
Coopdemà. Además, este préstamo supone que quien lo da participa en el riesgo
de la operación. Su retorno tiene dos partes, una fija y una variable en
función de los resultados de la cooperativa. «Esto hace que las entidades
estudien muy bien los movimientos que hacen», dice Jean François Guillemet.
Para terminar de dar liquidez al conjunto el Timbal negoció
una póliza de crédito, también con una cooperativa de crédito, como es la Caja
de Ingenieros, que ha concedido hasta 30.000 euros, cantidad que acaba de
asegurar la viabilidad económica del proyecto.
La tarea era difícil. Conseguir en estos momentos
300.000 euros no es sencillo, y menos para una cooperativa. La primera decisión
fue implicar directamente a los socios trabajadores, que se comprometieron a
ampliar sus aportaciones hasta alcanzar un 20% del presupuesto, 60.000 euros”,
asegura Guillemet.
La Intercooperación clave en el proyecto
Marc Brualla pone el énfasis en la implicación de muchas
entidades en la ayuda del proyecto del Timbal. Además de la inversión y el
asesoramiento, imprescindibles para impulsar el proyecto de futuro de su
cooperativa, «además nos han ayudado otras entidades, por ejemplo para hacer un
vídeo de la cooperativa Compacto que explicara qué queríamos hacer, lo que nos
ha ayudado mucho, porque nos ahorra muchas explicaciones». También ha sido
clave en el impulso del nuevo Timbal, Miquel, de la cooperativa Amas4, que hace
el acompañamiento desde el punto de vista del marketing y la comunicación. Todo
ello «muestra que las cooperativas, con la Federación a la cabeza, disponen de
nuevas vías para financiar sus proyectos y no tener que ir a parar a las
entidades convencionales. Esto debería hacer posible que muchos posibles
proyectos salgan adelante si la gente pierde el miedo a endeudarse», explica
satisfecho el responsable del Timbal.
De hecho, antes de
que la nueva instalación esté en marcha, los efectos de la operación ya se
producen. El Timbal ha incrementado un asociado y ha incorporado como socios
colaboradores los trabajadores de la casa, además de integrar como socios de
consumo muchos de los alumnos. Todo ello ha hecho que la gran familia creada
alrededor de esta cooperativa esté más unida que nunca ante el salto adelante
que se prepara.
No hay comentarios:
Publicar un comentario