En sentir la paraula il·luminat, pensem habitualment en gurús o místics però pot tenir altres significats.
-
Una cosa en la que la llum enfoca la seva claror i així es fa
visible.
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Quan quelcom ens sorprèn o ens alegra fa que se´ns il·lumina la
cara!
-
En descobrir la resposta d'un problema se´ns il·lumina la ment
S'ha
donat moltes voltes a la dicotomia llum-foscor. Potser caldria
donar-li un ordre de preponderància al binomi, per que només la
llum és la cosa certa. Ben mirat, què és la foscor? La foscor no
és res, és l'absència de llum. Amb la llum pots foragitar la
foscor i no a la inversa. La foscor apareix només quan desapareix la
llum.
Què
ens passa a dins nostre? Si estem animats, alegres els ulls se´ns
posen vius i clars. Quan la nostra mirada es apagada denota la foscor
interna, la manca de llum interior. La llum la podem tapar, amagar i
provocar foscor, però no la podem fer desaparèixer. Per això podem
confiar en que la llum és sempre a dins nostre i que només l'hem de
destapar.
El
sol il·lumina els nostres dies, però també s'amaga i deixa pas a
la foscor de la nit. No desapareix, només el tapa la Terra al girar,
com un commutador gegant que obre i tanca la llum periòdicament.
Cada
ésser humà és un microcosmos semblant. Només ens cal trobar on és
el nostre interruptor de la llum per a encendre'l quan ens sentim
immersos en la foscor. Només un "clic" i la claror ho
envairà tot en nosaltres i en el nostre entorn
Nosaltres
som com una pila elèctrica. Estem carregats d'energia que fem servir
per a viure. Es una energia que serveix per a tot i que es
retroalimenta. Si ens hi fixem la podem fer servir en aquells casos
en que ens trobem baixos de to, desorientats, desanimats…
Quan
ens despertem a la nit i tot és fosc cerquem a les palpentes
l'interruptor de la llum fins que el trobem i l'encenem. Tot
s'il·lumina i, amb la claror, ens posem en marxa. Així exactament
es com funciona el nostre "llum intern" que ens costa
encertar-lo a la primera però que segueix sent allà per a que
l'encenguem quan el necessitem.
Quan
ens haguem "il·luminat" la nostra llum farà claror al
voltant nostre també i d'aquí ve allò de arranja't a tu mateix que
de rebot ajudaràs als altres que tinguis més a prop. Tu no fas res
més que veure-hi clar però de retruc la teva llum il·lumina
aquells amb qui et trobes.
Ningú
salva a ningú però tots estem interrelacionats i la tasca de
cadascú aprofita a tots. Ajuda't a tu mateix, estima't tant com
puguis i el benestar que aconsegueixis per a tu es desplegarà de
forma benèfica al teu voltant.
La
pau que aconsegueixis irradia i encomana. S'escampa i amara tots
aquells que, sense que tu hi facis res, se la deixin sentir. La tasca
sempre es amb un mateix però els beneficis són generals.
Joan
Martí
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ILUMINARSE
Al oír la palabra iluminado, pensamos habitualmente en gurús o místicos pero puede tener otros significados.
- Algo en lo que la luz se enfoca y así se hace visible.
- La reacción cuando algo nos sorprende y nos alegra: nos ilumina la cara!
- Descubriendo la respuesta de un problema se nos ilumina la mente
Se ha dado muchas vueltas a la dicotomía luz-oscuridad. Quizás habría que darle un orden de preponderancia al binomio, para que sólo la luz es la cosa cierta. Por que, ¿qué es la oscuridad? La oscuridad no es nada, es la ausencia de luz. Con la luz puedes ahuyentar la oscuridad y no a la inversa. La oscuridad aparece sólo cuando desaparece la luz.
¿Qué nos pasa en nuestro interior? Si estamos animados, alegres los ojos se nos ponen vivos y claros. Cuando nuestra mirada se apaga denota la oscuridad interna, la falta de luz interior. La luz la podemos tapar, ocultar y provocar oscuridad, pero no la podemos hacer desaparecer. Por eso podemos confiar en que la luz siempre está en nuestro interior y que sólo tenemos que destaparla.
El sol ilumina nuestros días, pero también se esconde y da paso a la oscuridad de la noche. No desaparece, sólo lo tapa la Tierra al girar, como un conmutador gigante que abre y cierra la luz periódicamente.
Cada ser humano es un microcosmos similar. Sólo tenemos que saber dónde está nuestro interruptor de la luz para encenderlo cuando nos sentimos inmersos en la oscuridad. Sólo un "clic" y la claridad lo invadirá todo en nosotros y en nuestro entorno
Nosotros somos como una pila eléctrica. Estamos cargados de energía que utilizamos para vivir. Es una energía que sirve para todo y que se retroalimenta. Si nos fijamos la podemos utilizar en aquellos casos en que nos encontramos bajos de tono, desorientados, desanimados ...
Cuando nos despertamos por la noche y todo está oscuro buscamos a tientas el interruptor de la luz hasta que lo encontramos y la encendemos. Todo se ilumina y, con la claridad, nos ponemos en marcha. Así exactamente es como funciona nuestra "luz interna" que nos cuesta acertar a la primera pero que sigue estando allí para que la encendamos cuando lo necesitamos.
Cuando nos hayamos "iluminado" nuestra luz resplandecerá a nuestro alrededor también y de ahí viene lo de arreglate a ti mismo que de rebote ayudarás a los que tengas más cerca. Tú no haces nada más que ver claro pero de rebote tu luz ilumina aquellos con quienes te encuentras.
Nadie salva a nadie pero todos estamos interrelacionados y la labor de cada uno aprovecha a todos. Ayúdate a ti mismo, ámate tanto como puedas y el bienestar que consigas para ti se desplegará de forma benéfica a tu alrededor.
La paz que consigas irradia y contagia. Se esparce y empapa todos aquellos que, sin que tú hagas nada, se la dejen sentir. La tarea siempre es con uno mismo pero los beneficios son generales.
Joan Martí
elcamidelavida@gmail.com
Al oír la palabra iluminado, pensamos habitualmente en gurús o místicos pero puede tener otros significados.
- Algo en lo que la luz se enfoca y así se hace visible.
- La reacción cuando algo nos sorprende y nos alegra: nos ilumina la cara!
- Descubriendo la respuesta de un problema se nos ilumina la mente
Se ha dado muchas vueltas a la dicotomía luz-oscuridad. Quizás habría que darle un orden de preponderancia al binomio, para que sólo la luz es la cosa cierta. Por que, ¿qué es la oscuridad? La oscuridad no es nada, es la ausencia de luz. Con la luz puedes ahuyentar la oscuridad y no a la inversa. La oscuridad aparece sólo cuando desaparece la luz.
¿Qué nos pasa en nuestro interior? Si estamos animados, alegres los ojos se nos ponen vivos y claros. Cuando nuestra mirada se apaga denota la oscuridad interna, la falta de luz interior. La luz la podemos tapar, ocultar y provocar oscuridad, pero no la podemos hacer desaparecer. Por eso podemos confiar en que la luz siempre está en nuestro interior y que sólo tenemos que destaparla.
El sol ilumina nuestros días, pero también se esconde y da paso a la oscuridad de la noche. No desaparece, sólo lo tapa la Tierra al girar, como un conmutador gigante que abre y cierra la luz periódicamente.
Cada ser humano es un microcosmos similar. Sólo tenemos que saber dónde está nuestro interruptor de la luz para encenderlo cuando nos sentimos inmersos en la oscuridad. Sólo un "clic" y la claridad lo invadirá todo en nosotros y en nuestro entorno
Nosotros somos como una pila eléctrica. Estamos cargados de energía que utilizamos para vivir. Es una energía que sirve para todo y que se retroalimenta. Si nos fijamos la podemos utilizar en aquellos casos en que nos encontramos bajos de tono, desorientados, desanimados ...
Cuando nos despertamos por la noche y todo está oscuro buscamos a tientas el interruptor de la luz hasta que lo encontramos y la encendemos. Todo se ilumina y, con la claridad, nos ponemos en marcha. Así exactamente es como funciona nuestra "luz interna" que nos cuesta acertar a la primera pero que sigue estando allí para que la encendamos cuando lo necesitamos.
Cuando nos hayamos "iluminado" nuestra luz resplandecerá a nuestro alrededor también y de ahí viene lo de arreglate a ti mismo que de rebote ayudarás a los que tengas más cerca. Tú no haces nada más que ver claro pero de rebote tu luz ilumina aquellos con quienes te encuentras.
Nadie salva a nadie pero todos estamos interrelacionados y la labor de cada uno aprovecha a todos. Ayúdate a ti mismo, ámate tanto como puedas y el bienestar que consigas para ti se desplegará de forma benéfica a tu alrededor.
La paz que consigas irradia y contagia. Se esparce y empapa todos aquellos que, sin que tú hagas nada, se la dejen sentir. La tarea siempre es con uno mismo pero los beneficios son generales.
Joan Martí
elcamidelavida@gmail.com
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